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¿Sabes qué?
Lo sabes todo:
la clavija que me tensa
la tensión necesaria
y la nota que entonó…
¿ Sabes qué?
Lo sabes todo:
la palabra necesaria,
la pausa que calma
y el énfasis del acento.
¿Sabes qué?
Lo sabes todo:
el gesto que provoca,
el silencio que me llena
y la risa que acaricia.
¿ Sabes qué?
Lo tienes todo:
la esperanza que engrandece,
el valor de la conquista,
y la belleza de lo ignoto.
¿Sabes qué?
He vivido antes tangencialmente.
Vivo ahora intersecando
pasiones, fuegos y cielos
que me das cuando tus palabras acarician
mi cuerpo y mi ser se vuelve uno contigo…
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