Con alas pintadas de cristales brillosos
volando en cielos presurosos
invoca amores el beso quemante.
El fuego de un beso
que ardió incandescente,
un instante preso
que, aún, bulle caliente.
Dejando caricia impregnada
que queda, en aliento de menta
con olor fragante
despierta pasiones el beso en el cielo
regalando candores a sus amantes.
Un beso bordado en el terciopelo
de un cielo plagado de estrellas brillantes
con ojos y aliento que abrazados juntos
fueron solo almas con letras por velo.
Almas sedientas bajo el embrujo del beso
atando pasiones con amor ardiente
reviven recuerdos en silencio presente,
bañándose de arrebatos y sueños confesos
En un sueño se besaron
aquellos ojos y aliento
y marchándose a lo azul
fueron nubes en el viento
y ya sus bocas mojadas
entre el color desteñido,
llanto de un cielo llovido,
van muriendose abrazadas
y el beso de terciopelo
fué sólo un beso en el cielo.