Alejandro Aura

Alejandro Aura nació en México DF el 2 de marzo de 1944. Fue un escritor, dramaturgo y poeta mexicano.

En marzo de 1995 , Aura, fundó el club nacional de lectura Aureolas, en el Centro Cultu-bar El hijo del cuervo, en donde llevó a cabo, desde 1984 hasta 1999, innumerables actividades artísticas, culturales y sociales.


También, Alejandro Aura, fue director general (fundador) del Instituto de Cultura de la Ciudad de México, 1998-2001.

Alejandro Aura estaba radicado en España desde el año 2001 a donde llegó como responsable del Instituto de México en España, cargo que ejerció hasta 2003, por lo que después decidió establecer su residencia en esta ciudad.

Aura trabajaba desde 2004 en la Representación del Gobierno de Zacatecas, México, para la realización de actividades culturales, a la vez que mantenía su producción literaria.

Además de haber ejercido como director del Instituto de México en España, Alejandro Aura produjo el programa radiofónico de México para Radio Círculo de Bellas Artes de Madrid, en el que algunos años promovió la cultura mexicana.

Entre las principales obras de Aura destacan “Los Baños de Celeste” y “Volver a casa“, que le valieron premios en la década de los 70; además de obras de teatro, como “Salón Calavera” y “Las visitas“.

Otras obras reconocidas de Alejandro Aura en poesía son “Cinco veces flor”, “Volver a casa“, “Tambor interno” y “Poeta en la mañana“, y ya como residente en España, Aura presentó su libro “Poemas y otros poemas”.

Publicó unos 25 libros de poesía, cuento, teatro y ensayo, y en le década de los ochenta fue director de Teatro y Danza de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

El 30 de julio de 2008, el escritor mexicano Alejandro Aura falleció en Madrid (España), acompañado de su esposa y su hija, aquejado de un cáncer que padecía desde hace algunos años.

Poeta, narrador, dramaturgo y director de escena, Alejandro Aura, fue un escritor incansable, que en sus al menos 30 obras que escribió a lo largo de sus 64 años, destacó su gozo de vivir con sencillez y el amor a lo humano.

Aura destacó en géneros tan diversos como la poesía, el teatro y el cuento, aunque también incursionó como director y guionista de programas de radio y televisión.

Aura fue un maestro polifacético, pero siempre se mantuvo cerca del teatro, que fue su más grande afición.

Dirigió sus propias obras de teatro, entre las que destacan “Las visitas” (1979) y “Salón calavera” (1982). Además de la pastorela anónima “Luzbel” (1979), “María la voz”, de Juan de la Cabada; “Cómo han de ser los amigos”, de Tirso de Molina; “El tabarro”, de Puccini (1983) y “La güera“, de Carlos Jiménez Mabarak.

Aún en sus horas de agonía, Aura nunca dejó de escribir, en su inseparable block de su página Web dejó un sentido poema de despedida a sus seguidores en el que se lee: “Así pues, hay que en algún momento cerrar la cuenta, pedir los abrigos y marcharnos/ aquí se quedarán las cosas que trajimos al siglo y en las que cada uno pusimos nuestra identidad…”.

Fuente: Es Mas

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Poema Triste de Alejandro Aura


No se puede escribir si se está triste,
el oficio se atasca, predomina la línea pedregosa
por la que no puede fluir ni una palabra cierta,
el paisaje es escombro de nombres sin sentido
y los ojos erráticos no se pueden fijar en cosa alguna,
transcurre un coche despacio por el siglo pasado de la
ventana
y se lleva arrastrando la poca magia que la imaginación,
sirvienta remolona del deseo, estaba queriendo construir
y queda sólo un tiradero de añicos vidriosos y salados,
no hay nada tan triste como un poeta triste
tratando de escribir en su tristeza.

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